Crear un blog.
Crear un blog es interesante para cualquier página web, atrae más visitas. Una parte de esas visitas pueden convertirse en clientes a medio plazo.
La gran mayoría de las webs tienen un enfoque comercial o de crear marca. Sin embargo, los usuarios en muchas ocasiones hacen búsquedas en internet para encontrar información sobre un tema que les preocupa o les interesa. No se limitan a comprar.
El contenido de un blog es informacional, y es aquí donde puedes atraer a un público cualificado, con intereses coincidentes con tu actividad.
Buscar información sobre un tema es una fase anterior a la compra. Es lo que en marketing se llama Coustomer Journey. El viaje que hace un usuario antes de comprar.
Por problemas de espacio no vamos a hablar de él en este artículo. Lo que sí quiero resaltar es que cuando una persona descubre que tiene un problema, lo primero que hace es buscar información sobre él. Después investiga cómo lo puede resolver. Es aquí donde nosotros podemos ayudar al usuario con nuestro blog, aportándole información relevante.
Si nosotros compartimos información interesante y valiosa para el lector, es probable que siga nuestro blog y nos ganemos su confianza. Cuando esto suceda, en el momento en el que necesite comprar un producto o contratar un servicio que ofrecemos, tenemos muchas papeletas para que piense en nosotros.
El blog también influye en el posicionamiento online de tu web. Al publicar más contenido relacionado con una temática tienes más opciones de aparecer en las búsquedas. Al mismo tiempo, Google te recomendará con más frecuencia, al ver que dispones de una página, bastante completa, especializada en un tema determinado.
El blog te obliga a publicar artículos con frecuencia. Google premia a las web que actualizan contenido subiéndolos en el ranking de posiciones, y penaliza a las que se quedan paradas.
¿Qué contenido debe tener un blog?
Tu blog debe tener el objetivo de atraer visitas y su contenido debe centrarse en resolver las dudas y problemas de tu audiencia. O aportar información sobre los asuntos que le interesa.
Un blog nunca debe hacerse para publicar lo que a uno le apetezca o para demostrar que sabe mucho sobre algo. Esta es una cuestión difícil de comprender para los bloguers que venimos de la época en la que los blogs eran un medio de expresión. Por entonces, muchos creábamos blogs para hablar de música, de cine, de comics, sin preocuparnos de si nuestros textos generaban resultados o no. Al final, si te esfuerzas en hacer una cosa, pero no ves ningún resultado, dejas de hacerlo. La necesidad siempre sepulta al hobby.
Por tanto, debes publicar artículos que aborden la intención de búsqueda de tu cliente potencial, en temas que se relacionen con la temática de tu web. Un ejemplo: si tienes una web sobre un hotel en Barcelona, escribe textos recomendando lugares curiosos que descubrir. Por dónde salir de fiesta en la ciudad. Publica un artículo sobre la historia de la Sagrada Familia, es el monumento más visitado. Piensa que un turista, antes de buscar un alojamiento, lo primero que hace es informarse sobre el lugar al que quiere viajar.
Desde luego, los artículos deben estar orientados al SEO. Debes hacer una investigación de palabras clave informacionales para averiguar que búsquedas realiza tu público objetivo. Pasado un tiempo desde que publicamos el artículo, debemos hacer una curación de contenido, igual que haríamos con cualquier otra página de nuestra web.
El bloguer que aprendió SEO.
Como has podido intuir, yo empecé escribiendo blogs. Escribir era mi pasión, y aunque no representaba mi activa laboral principal, siempre he colaborado escribiendo artículos para revistas impresas y digitales independientes.
Cuando vivimos el confinamiento del COVID-19, decidí invertir mi tiempo en montar un blog sobre la historia del Rock. Como recibía visitas, propuse a unos amigos gestionar un blog para su restaurante. La idea era aumentar la popularidad del establecimiento. Todo lo contrario a un objetivo de marketing, no se podía medir.
Por aquel tiempo llegué a autopublicarme hasta 5 libros en Amazon. Fue una época prolija.
Recuerdo que las visitas a los blogs las obtenía compartiendo contenido en grupos de Facebook. Era un trabajo de chinos. Dedicaba casi tanto tiempo a la promoción como a la redacción de artículos.
Mis libros los vendía enviando WhatsApp a mis amigos y mensajes privados a mis seguidores por redes sociales. Algunos de ellos terminaron de mí hasta las narices.
Para escalar mis proyectos necesitaba llegar a gente que no me conociera, pero que estuviera interesada en lo que hacía.
Tuve que aprender SEO y marketing digital por necesidad, formándome en cursos, algunos de ellos impartidos por Google.
En este proceso de formación descubrí que hay que encontrar el punto de intersección entre lo que te gusta hacer y lo que busca la gente, teniendo la batuta de mando, las necesidades de los usuarios. Esto me cambió por completo la perspectiva.
Ahora me dedico a escribir artículos patrocinados para una agencia y a prestar servicios SEO a terceros. Desde luego, actualmente, cuando monto un blog, no lo hago como hacía antes.
Consejos para crear y gestionar un blog.
Para llevar un blog hay dos cuestiones esenciales que deben estar presentes en todo momento, la investigación y la constancia. Estos son algunos consejos, extraídos de mi práctica, que pueden serte útiles si te has decidido a crear un blog:
- Define el nicho. El tema sobre el que va a tratar el blog. Asegúrate de que sea un nicho con público. Si tu blog forma parte de una web, el nicho debe estar relacionado con la página. Para darle una orientación, investiga qué asuntos le interesan a tu público.
- Investigación de palabras clave. Una vez decidido el nicho, investiga con qué palabras buscan los usuarios el contenido que quieres ofrecer. En esa búsqueda descubrirás también qué cuestiones les interesa.
- Investiga la competencia. Navega por internet y visita blogs y páginas web con blogs que ofrezcan un contenido parecido al que quieres redactar. Esto te servirá de inspiración para sacar ideas.
- Hazte un plan de contenidos. Apunta en una planilla ideas de artículos y cuando los quieres tener editados. Si tu web es comercial, piensa en campañas concretas y qué temas pueden interesar a tu público en esas fechas.
- Publica periódicamente. Si creas un blog es para publicar contenido con periodicidad. No hay nada más decepcionante que entrar en un blog y ver que solo tiene 2 entradas o que la última la publicó hace 2 años. No necesitas publicar todos los días. A veces con una entrada o dos a la semana es suficiente.
- Ajusta el contenido en función de las visitas. Si ves que una entrada tuya sobre un tema determinado ha tenido muchas visitas, plantéate redactar más artículos parecidos. Es un indicador de que ese tipo de contenido le gusta a tu audiencia.
Tengas el tipo de web que tengas: una tienda online, una página de empresa, una web temática, etc. incorporar un blog es una buena idea. Somos conscientes de que lleva tiempo, pero si lo necesitas, podemos ayudarte en esta tarea. Tenemos experiencia.